Por un mundo multipolar. (s. f.). https://www.elviejotopo.com. https://www.elviejotopo.com/topoexpress/por-un-mundo-multipolar/
Hace unos cuantos años escribí la entrada “La guerra ruso-ucraniana ¿El inicio de la Segunda Guerra Fría”? A tres años con otra perspectiva puedo concluir que sí. El mundo actual esta pasando una etapa difícil, como la vivida entre 1945-1991, pero en este caso con más polos ideológicos, no sólo los clásicos bloques occidentales y orientales sino con un gran número de ideologías: nacionalismos y agendas globalistas. Es un tema muy denso que desde mi punto de vista hace que mucha gente pierda el hilo de la situación actual. Hace una semana se creía que Medio Oriente sería el percutor de la Tercera Guerra Mundial, pero nada más fuera de la realidad, es un conflicto más que se suma al siglo XXI. Con ésto no quiero decir que nos libramos de un riesgo tangible. La guerra entre muchos países como la que hoy se esta librando en el oriente de Europa, en el Cáucaso, en África y en Medio Oriente. Si contamos con las batallas culturales que se están librando en América, como la del argentino Milei y su nueva postura contra el antiguo sistema, la del salvadoreño o la del mismísimo Trump que libra hoy contra la izquierda y el wokismo radical. El mundo de hoy está viviendo una sobre saturación de noticas que a mi parecer está adormeciendo al público, debido a que se nos hace normal escuchar de bombardeos o de genocidios como los que vive la población civil en Gaza.
Además de que no llegamos a distinguir entre conflictos. Desde mi punto de vista el mundo se pude dividir en dos hemisferios completamente diferentes oriente y occidente. Oriente esta conformado por una extensa cantidad de culturas y países que en su momento fueron grandes imperios civilizadores como el imperio mongol, persa, chino, indio, mesopotámico, otomano, etc. Qué comparten estos países, podríamos decir que la gran mayoría comparten tres cosas muy características: autoritarismo, religión hegemónica en cada país y cultura imperial. Estamos en una región del mundo donde los vecinos tienen aspiraciones de grandeza, sólo hay que ver de reojo a toda Asia y se percatarán que Medio Oriente es un polvorín porque conviven la cultura árabe, judía, turca, persa, armenia y kurda. En el otro lado del continente se encuentra una zona super poblada que la conforma la República Popular China, Bharat (India) y Pakistán, sin olvidar a Japón, las Coreas y al gigante ruso, que desde mi punto de vista es un hibrido que considero más occidental, pero comparte muchas tradiciones y ritos orientales. Viendo este panorama podremos concluir que Oriente es muy complejo geopolíticamente.
En cambio, Occidente es igual de fascinante, pero más sencillo de describir, es todo país que se basa en la cultura cristiana romana desde la Patagonia a las islas mas remotas de Canadá, y de ahí hasta los rincones mas alejados de la Rusia ortodoxa. Un vasto territorio que comparten lo que fueron las potencias del viajo mundo: España, Inglaterra, Francia, Países Bajos, Italia, etc. Son países que se consideran del primer mundo, pero más allá de su poder económico o militar Occidente se destaca por su fe, su ley y su filosofía. Basada fundamental mente en Grecia y Roma.
¿Qué sucede en Medio Oriente?
Ésta es la noticia más popular de hoy en día; la guerra entre el enorme país persa y la escurridiza nación hebrea, este conflicto es muy extenso y complejo de explicar paso a paso. La nación hebrea desde su fundación en 1948 no ha hecho mas que establecerse cueste lo que cueste, desde su primer día estuvo en guerra con sus vecinos islámicos no ha sabido formar una relación mas que con sometimiento y desigualdad. No es circunstancial que el país persa (Irán) sea una amenaza porque al tener la capacidad de fabricar armas nucleares esto equilibraría la balanza en la región creando garantías para los aliados de Irán. Este punto es el que resume por completo la guerra vivida hace unos días, la garantía de que Irán sea un igual con Israel.
Esto claro es una práctica que creo yo se dejó desde que se firmara el tratado de Versalles, un documento que pisoteo a Alemania y que los mismos franceses gestaran la Segunda Guerra Mundial, al privar y humillar a los alemanes y aliados. La garantía del vencido es un parteaguas entre la barbarie y la civilización. ¿Qué país se rendiría sin tener garantías? esto no lo entienden los sionistas de Washington y las otras capitales europeas, su avaricia lo único que provoca es más caos. Lo que podemos ver es la estela de desgracias que deja los Estados Unidos en cada país que intervienen: Libia, Irak, Siria, Afganistán, etc. Creo yo que es mejor un totalitarismo que una anarquía. Una nación sin cabeza pierde garantías, eso es lo que intentó Benjamín Netanyahu; acabar con el régimen de los Ayatolas para que no estorbaran más, pero ¿para sustituirlo con qué…? Ésto es lo que no ven los medios, el caos global esta ganando terreno por estas decisiones de terminar algo, pero no hace mas que avivar un caos que ni los mismos israelíes y gringos son capaces de dimensionar.
Rusia y Ucrania:
A diferencia del conflicto en Medio Oriente esta guerra está librándose en territorio occidental. Una tragedia porque más allá de que sea una guerra de religiones o de credos, es una guerra fratricida; rusos y ucranianos, dos pueblos que podríamos decir que son hermanos o practicante ramas de una misma planta.
No me voy a mater en la rica historia de estos países eslavos, pero creo importante hacer entender a la gente de occidente de que esta guerra está derramando sangre innecesariamente. La guerra entre nosotros, lo único que hace es debilitar a Occidente. Rusia es una potencia que siempre ha tenido un lugar muy importante en Occidente desde sus expansiones con los Romanov hasta lo que hoy podríamos decir la Rusia postsoviética, un país que ha estado forjando y creando lasos con sus antiguas posesiones soviéticas.
¿Qué podremos esperar de la guerra ruso-ucraniana? Realmente Occidente no está dispuesto a negociar con Moscú, Kiev tampoco se ve entusiasmada en hacerlo con su contraparte. La entrada de Trump a su segunda presidencia era una gran promesa, pero después de su espectáculo con Zelenski en la Oficina Oval y los bombardeos de Rusia a Ucrania y de Ucrania a Rusia en tiempos de negociaciones me dan a entender de que esta guerra se terminará estancada en una especie de conflicto de desgaste. Debido a que Ucrania está entre la espada y la pared, porque no será admitida en la OTAN o la UE. Su apoyo no será tan fácilmente retirado, durará unos cuantos años más, una guerra creo yo que podría ser terminada más pronto que tarde si se tuviera la intención de detenerse. Ya que no es lo mismo lo que sucede en Medio Oriente, que es una guerra de odio, una guerra de religión y raza. Rusia y Ucrania están sangrando hermanos de una misma cultura.
Occidente en retirada:
Occidente esta agonizando, no es de extrañar que Europa y América estén pasando por una etapa de grandes cambios. Los nacionalismos están siendo sustituidos por las ideologías, la identidad de los pueblos esta siendo sustituida por una agenda global absorbente que trata de homogeneizar al mundo occidental. Hay que ser claros, la agenda 2030 es una apuesta imposible en naciones que apenas pueden sostenerse por si solas o que tiene tradiciones que no son compatibles con esas ideas. Esto blinda a Oriente, una gran cortina de países y culturas que no se pueden reducir a un rasgo o credo. Pero Occidente es todo lo contrario, aunque tengamos muchas lenguas y países, lo que rige a Occidente es la estructura fundamental romana católica que hasta hoy en día sigue estando presente en esta parte del mundo, si bien ha estado perdiendo sustancia gracias a las agendas de la ONU y demás organismos.
Hoy podríamos hablar de que Occidente está dividido en dos grandes bloques, el Occidente tradicionalista que encabezan líderes como Trump, Milei, Bukele, Meloni, Orbán, Santiago Abascal, Le Pen, etc. El Occidente Progre que está básicamente soportado por las cúpulas gubernamentales de la Unión Europea, el partido demócrata, PSOE, Trudeau etc. Son dos modelos antagónicos que conviven día con día, podríamos decir que el mimo hemisferio occidental esa viviendo una etapa de guerra interna. En Hispanoamérica es palpable la tensión, el mapa geopolítico creo yo nunca ha sido tan tenso. Un punto a destacar es que cada día que pasa me convenzo más que el antiguo modelo de los políticos ya no será el estándar. Si analizamos las características de cada presidente o jefe de estado podríamos concluir que el populismo y la antítesis de los políticos son la nueva imagen de los mandatarios. Esto no es más que un reflejo de que Occidente debe cambiar, pero teniendo en mente algo fundamental, los clásicos, Occidente debe tener en mente esto ya que el día que Occidente se deslinde de su origen, ese día podemos decir que dejamos de ser occidentales.
¿Qué nos espera?
No soy el oráculo ni un profeta, pero lo que tengo claro es que una guerra abierta entre grandes potencias no sería una opción. En esa parte me tranquiliza porque tanto los rusos, estadounidenses o demás potencia tendrían mucho que perder si no salen las cosas como planean, pero en contraparte las guerras libradas entre países chicos y potencias son cada vez mas comunes. No me extrañaría que China invadiera Taiwán o que Rusia también intentase anexionar Moldavia o que los mismos Estados Unidos ayuden a los hebreos, como siempre lo han hecho, es inevitable como diría Heródoto “la guerra es la madre de todas las cosas”, la naturaleza del hombre es la guerra. Una muy buena pregunta seria que pasaría si estudiamos la historia, pero omitiendo las guerras, tendríamos muy poco que estudiar, practicante la historia esta edificada en conflictos abiertos o cerrados.
Conclusión
He llegado a la conclusión de esta entrada, me costó volver a escribir en este blog porque no tenía algo en mente, pero al ver la situación de nuestro entorno actual creo relevante poder expresar mi opinión. No será la última vez que escriba sobre el tema, pero creo yo que este tema cubre bien los últimos tres años desde mi ultima entrada con respecto a la Segunda Guerra Fría.
La Lupa de Santiago 